czwartek, 29 sierpnia 2013

La Fe y la Esperanza, ingredientes de una Mente Poderosa



Se dice que la Fé mueve montañas y la Esperanza hace mas acogedora la espera. Pero porqué una persona que cultiva estas cualidades consigue lo que quiere e irradia una atmofera perceptible de Poder.
Para llegar al estado de Fé en la mayoría de los casos hay que luchar para llegar a él. La duda es parte del camino. La lucha personal por llegar a ese estado estará recompensado en sabiduría. La esperanza habitualmente acompaña el estado de Fé. La esperanza puede expresarse cono el don de la espera, es el estado de humildad en el cual una persona se dispone a recibir desde una conciencia de mayor inteligencia una añoranza o deseo que llegara en el momento indicado y lugar preciso. Podriamos decir que la esperanza en una persona puede ser el reconocimiento de que no controlamos la situación a nuestro antojo y sabemos esperar con humildad lo solicitado o deseado al Cosmos. La esperanza también puede ser la espera del cumplimiento de un deseo o situación requerida, visualizada con una muy positiva proyección, de que lo deseado si llegará.
Una persona con Fé, muestra convicción sobre su verdad, ni una mentira o una afirmación con fundamentos "sólidos" podrá afectarle. Ya que esa convicción la persona la ha ganado con ardua experiencia. La Fé la podríamos vincular a esa pureza o inocencia de los humanos, a esa chispa pura de luz que poseemos las personas, la cual reconoce el poder del Creador y confia en El, como también disfruta de la perfección del orden y armonia del Universo.

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